Todos los personajes que podrían fugarse muy pronto de la casa De la Reina en ‘Sueños de libertad’: “No aguanto más”

El personaje de Begoña ya se encuentra lo suficientemente despierto, en la serie Sueños de libertad, como para planificar su próxima fuga de la casa de los De la Reina. La enfermera de la ficción de época, que Antena 3 emite entre semana a las 15:45, seguirá haciéndose la débil y dormida frente a Jesús, mientras que, en las sombras, prepara su huida del tortuoso matrimonio. Pero en el capítulo de este jueves, ha comprobado que las cosas no serían tan sencillas para ella.

El capítulo de hoy del melodrama protagonizado por Natalia Sánchez, Alain Hernández y Dani Tatay, ha comenzado donde terminó el capítulo anterior: cuando Begoña le contaba a Luz sus planes de marcharse lejos de allí. La doctora Borrell se ha comprometido a ayudarla. Begoña ha ideado hacerle pensar a Jesús que seguía drogada, hasta coger un tren a Lisboa y desde allí viajar a Inglaterra. Luz le ha sugerido que contase con un aliado desde dentro, pero Begoña le ha dicho que no podría fiarse de Andrés, porque Jesús se acabaría enterando del plan.

“Que nadie sospeche nada, sobre todo Julia”, ha meditado la enfermera, a lo que Luz le ha contestado que la niña la echaría de menos. Begoña ha aclarado que pensaba llevársela consigo, pero su amiga ha intentado quitarle la idea de la cabeza. “No puedo dejarla en manos de ese monstruo”, ha justificado Begoña, pero Luz le ha dicho que Jesús la denunciaría por secuestro, y no pararía hasta encontrarla.

 Andrés ha visitado a Luz en el dispensario, diciéndole que no podía vivir mientras veía a Begoña tan mal. La doctora ha intentado no meter al chico en los planes de su amiga, así que, aunque el ingeniero ha propuesto que la viese un médico especializado, Luz le ha dicho que Begoña solo necesitaba tranquilidad. En ese momento, Jaime ha entrado, y Luz le ha mirado con cierto reproche.

 Jesús le ha preguntado a Damián si acaso él iba a ser la última opción siempre

 Digna ha accedido a la habitación de Begoña, y la afligida le ha agradecido lo buena que era con ella. El ama de llaves le ha explicado que Julia pasaba por un momento triste, pues estaba preocupada por el estado de salud de la protagonista. Begoña ha cogido de la mano a la señora, y le ha dicho que necesitaba que cuidase de Julia cuando ella no estuviese. Julia ha escuchado la conversación a través de la puerta.

Marta sale del armario

Por otra parte, Damián ha recibido las fotos de Marta y Fina que tomó el detective privado de Jesús. El empresario no ha tardado en llamar a su hija para escuchar de su boca el tipo de relación que mantenía con la dependienta. Al ver las fotografías, Marta se ha preguntado quién había podido hacerle algo así, pero Damián clamaba al cielo qué había hecho mal él. “Eres una farsante, una mentirosa”, ha repudiado el padre a la hija por sus actos. Marta ha defendido que aquello no se elegía, y que había intentado vivir lo que se esperaba de ella, pero esa no era su naturaleza: “Yo no he hecho daño a nadie. Simplemente, me he enamorado”.

 “¿Qué pasaría si esto sale a la luz?”, ha cuestionado Damián, a lo que Marta ha contestado que se lo preguntaba cada día. “No me queda más remedio que tomar algunas decisiones”, ha pensado el patriarca, alegando que no podía permitir que fuese ella quien recogiese el premio a la empresa. “Sus ideas retrógradas están por encima de mí”, ha acusado la hija al padre, entre lágrimas.

Damián ha anunciado a Andrés y Jesús que no sería Marta quien diese el discurso en representación de la empresa, sino que sería él mismo quien lo hiciese. A solas con su padre, Jesús le ha preguntado si acaso él iba a ser la última opción siempre, y el padre ha contestado que no merecía que le diesen ningún premio por sus malas artes. “Has intentado acabar con la vida de tu mujer, ahora lo intentas con tu hermana”, ha repasado el padre, “¿Cuál es tu límite?”.

El gran deseo de marcharse

Andrés ha encontrado a Marta bebiendo en la cocina, y le ha preguntado por qué había rechazado la oportunidad de recibir el premio. La chica ha alegado tener sus ocupaciones prioritarias, pero, sumida en su tristeza y rabia, se ha quejado de que en aquella casa no se podía respirar, pues era una jaula de oro. Marta ha asegurado haber construido un personaje que no era ella, y ha adelantado que le daban ganas de largarse de allí y empezar de nuevo en otra parte: “Esta familia es una gran farsa y yo ya no sé quién es quién. No aguanto más”. ¿Se rebelará Marta contra los De la Reina? ¿Se aliará con Begoña?

Begoña estaba en su habitación cuando Julia ha entrado. La madre ha intentado ponerle la medalla que le regaló Mercedes, diciéndole que algún día sería suya, pero la niña se ha negado a llevar un recuerdo suyo por el hecho de que no estuviese presente. Julia ha protestado de que se negaba a que la llevasen a un hospital, y que se moriría sin ella. Begoña ha contemplado que no podría pasar página dejando a Julia atrás, y le ha jurado que nunca se separaría de ella. ¿Se la llevará a Inglaterra? ¿Cómo recalculará Begoña su plan de fuga?