[Sueños de libertad] Avance del capítulo 124 (lunes, 19 de agosto): La crueldad de María la aleja de nuevo de Andrés

Jesús sigue mostrando su cara más amable con Begoña, consiguiendo que la chica crea que realmente está de su parte. Al mismo tiempo, la sigue drogando para que su salud empeore a medida que pasan las horas.

Mientras a todos les parece una buena idea con la que ganarse a los empleados, Jesús cree que es un gasto insulso y fuera de lugar. Aunque, como su opinión en este caso no vale nada, solo les impondrá una cosa: la supervisión de Isabel.

El mayor de los De la Reina además no le quita el ojo de encima a su hermana Marta, que parece estar más cerca que nunca de Jaime. Y es que la mujer quiere anticiparse a situaciones que están por venir a raíz de la enfermedad de su marido, pero solo consigue agobiarlo cuando él busca vivir el presente y no pensar en lo inevitable.

Para Fina no pasa desapercibida la tensión que hay en cada encuentro entre Claudia y Mateo y la chica le cuenta finalmente lo que pasó entre ellos. Lo cierto es que fina la entiende mejor que nadie, lo suyo si que es una relación imposible. Sobre todo ante el hecho de que tanto ella como él parecen sentir lo mismo.

A pesar de ello, Carmen es consciente que sin su apoyo, Tasio puede volver a su época más oscura, por lo que piensa en alguien para que le ayude a mantenerlo en el buen camino.

María aprovecha cada ocasión para afear el comportamiento de Begoña cuando insinuó que Gema había cogido la medalla de su madre. Andrés está harto de la actitud de su mujer, sobre todo cuando Begoña aparece tras ser testigo de las formas en las que la chica se ha dirigido a ella.

Y es que María acaba por decirle que debería estar en un psiquiátrico como su madre, lo que molesta profundamente a Andrés y lo vuelve a alejar de ella.

Luis vuelve a acercarse a Luz y le pide que le cuente toda la verdad. La doctora, confiando en que es lo mejor para su relación, le abre su corazón y le cuenta como ha sido toda su vida sin reservas… pero, en contra de las expectativas que le causó Jaime, se encuentra con una reacción de Luis que no esperaba, que solo mira por el bien de la empresa.

María y Gema inician los preparativos de la fiesta, pero la presencia de Isabel trastocará todos sus planes.

Los Merino avanzan en el proyecto del balneario, y parece que la situación de partida es mucho más propicia de lo que esperaban. Fina celebra ver felices y unidos a sus hijos.

Joselito llega a la colonia iniciar un noviazgo con Claudia y al primero que conoce es a Mateo. El chico está convencido de que volverá a Don Benito del brazo de la dependienta, y ante su insistencia, Claudia se ve obligada a revelarle un detalle sobre su futuro.

Aunque enfadaron a Andrés, las palabras de María no caen en saco roto y el hijo pequeño de Damián comparte con Luz su preocupación por Begoña… Luz se compromete a visitarla y durante su encuentro con ella comprueba que está peor de lo que pensaba… Parece que su extraño comportamiento no tiene nada que ver con los ansiolíticos.