Avance del capítulo 115 (lunes, 5 de agosto): Jesús descubre que Andrés y Begoña tienen una relación
Jesús y Andrés llevan a Begoña al límite, que acaba tomando una decisión de la que no podrá dar marcha atrás… Mientras, alguien inesperado descubre la relación de Marta y Fina, esta semana en ‘Sueños de libertad’.
María cae por las escaleras fingiendo un accidente. Andrés, Begoña, Jesús y todos en la casa corren a socorrerla. Jaime llega para atenderla y tras comprobar que todo parece estar bien más allá de unas magulladuras revisa su estado de embarazo por su el bebé hubiera sufrido daños.
Pronto el doctor descubre que en ningún momento ha estado embarazada, algo que por otra parte explica su comportamiento con él y Luz en los últimos días. Es el momento perfecto para jugar sus cartas.
Maria chantajea a Jaime para que mienta a todos dándoles una mala noticia: ha perdido a su bebé. Pero el doctor se niega en rotundo. Sin embargo… hay algo que María tiene contra él: conoce su relación con Luz.
Jaime está dispuesto a que la chica revele algo así ante todos, pero el miedo a las consecuencias que ello pueda tener para Marta o para la propia Luz le hacen aceptar el chantaje de María.
Andrés está destrozado y se siente culpable por lo ocurrido, mientras Jaime lucha contra su sentimiento de culpa por haber cedido a los deseos de María. Ello le produce nuevos ataques que cada vez son más difíciles de ocultar. Aunque disimula ante Marta, la mujer no tarda en darse cuenta de que algo le ocurre a su marido.
Luis confirma que Joaquín lo está saboteando en la empresa con la intención de que recapacite sobre su negativa a embarcarse en el proyecto del balneario, pero solo consigue enfrentarse de nuevo con su hermano y que este tenga que recurrir a su posición en la empresa para darle una orden tajante.
Influenciado por Don Agustín, Mateo pide a Claudia que participe con él como catequista en la Legión de María. La chica acepta ante las reticencias de Carmen, que ve como la relación entre el cura y Claudia cada vez es más cómplice.
Tasio comienza a hacer negocios con Íñigo vendiendo unas radios alemanas y ya tiene a su primer comprador: Gaspar. Sin embargo, hay algo extraño en el comportamiento del nuevo operario de la fábrica… y por supuesto, el hecho de que Tasio le esté ocultando a Carmen sus actividades de contrabando.
Digna no tarda en darse cuenta de las diferencias que hay nuevamente entre Luís y Andrés y ambos le explican el motivo… y acaban descubriendo que quizás no todo es blanco o negro… pudiendo encontrar una solución intermedia. Lo que está claro es que embarcarse en el proyecto del balneario es una tabla salvavidas para Joaquín.
Marta, preocupada por Jaime, comparte con Luz sus dudas y se preocupa por su salud. La doctora le miente y achaca su estado a la presión, el estrés o incluso la especial sensibilidad del doctor, asegurándole que no tiene nada de lo que preocuparse.
Pero después presiona a Jaime para que le cuente a Marta cuanto antes su enfermedad: merece saberlo y ocupar el lugar que le corresponde. Jaime le promete que en unos días le habrá revelado a Marta su difícil situación.
María finge sufrir por la pérdida de su hijo consiguiendo su objetivo: que Andrés no se separe de su lado… Además, le hace ver que culpa a Begoña por el accidente que sufrió.
La mujer de Jesús, por su parte, no aguanta más la presión y le suplica a Luz para que le recete más ansiolíticos. Pero la doctora intenta convencerla de que no es la salida: quizás debe afrontar su situación desde otro punto de vista y poner soluciones.
Marta y Fina disfrutan del concierto y a la salida se encuentran con alguien inesperado: se trata de Isabel, que casi las pilla en una actitud cariñosa.
Andrés promete dedicarse en cuerpo y alma a su matrimonio y rechaza a Begoña cuando ella, desesperada, busca consuelo en sus brazos, ignorando que alguien ha escuchado una conversación entre los amantes más que reveladora.
